El presidente Javier Milei liderará este miércoles una serie de reuniones en Casa Rosada en medio de la redefinición del organigrama estatal, luego de los cambios instrumentados y publicados en el Boletín Oficial que generaron tensiones dentro del Gobierno.
Desde las 9.30, el mandatario convocará a su mesa política, integrada por sus funcionarios más cercanos, y a las 10.30 ampliará el encuentro al resto de los integrantes del Gabinete. Participarán el jefe de Gabinete, Manuel Adorni; el ministro del Interior, Diego Santilli; la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich; la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem; y el asesor presidencial, Santiago Caputo.
La reunión se da tras la controversia generada por la reasignación del Registro Nacional de las Personas (RENAPER) al Ministerio de Seguridad, una medida que implicó el vaciamiento parcial de la cartera de Interior y que finalmente fue revertida por el Poder Ejecutivo.
Fuentes oficiales reconocieron que el traspaso fue un error administrativo, atribuido a la secretaria de Legal y Técnica, María Ibarzabal Murphy, aunque dentro del oficialismo hubo quienes interpretaron la maniobra como una disputa interna por poder. Desde el PRO, en cambio, apuntaron directamente a Bullrich: “Tiene el sello de Patricia. Si es por ella te vacía el ministerio”, señaló un dirigente del partido a la agencia Noticias Argentinas.
Incluso el referente bonaerense Cristian Ritondo se manifestó en público: “El Renaper siempre fue de uso civil. En la dictadura lo manejó Seguridad, pero luego volvió a su lugar original porque contiene datos muy sensibles para proteger”, recordó durante la jura de Santilli.
Durante la jornada, Milei escuchará las propuestas de Adorni y Santilli para reorganizar las áreas afectadas. Sin embargo, el ministro del Interior buscó bajar la tensión: “No me preocupan los cargos. Nuestra tarea es resolver y avanzar con las reformas estructurales”, afirmó.
En paralelo, el expresidente Mauricio Macri reunirá a la cúpula del PRO para definir la estrategia partidaria de cara a las elecciones presidenciales de 2027, en un escenario de creciente debate interno por el rol que la fuerza asumirá frente al gobierno libertario.
